La Junta impulsa la construcción, mejora y ampliación de puntos limpios, tanto fijos como móviles, para garantizar la recogida separada de residuos en toda la Comunidad
Los puntos limpios son infraestructuras esenciales que permiten a la ciudadanía depositar residuos de forma separada, incluyendo aquellos peligrosos o textiles, facilitando así su correcta gestión ambiental.
En una Comunidad Autónoma como Castilla y León, caracterizada por su baja densidad poblacional y una gran dispersión geográfica —con 2.248 municipios y más de 6.000 núcleos de población—, estos centros se convierten en un elemento estratégico. No solo están presentes en forma de instalaciones fijas en las principales localidades, sino también como puntos móviles, diseñados específicamente para cubrir zonas rurales o poco pobladas.
La Junta de Castilla y León ha puesto en marcha un ambicioso proyecto estratégico para reforzar su red de puntos limpios. Este plan contempla tres líneas de actuación:
construcción y mejora de puntos limpios fijos
subvenciones para infraestructuras existentes
adquisición de puntos limpios móviles y vehículos eléctricos
La inversión total supera los 24,3 millones de euros, financiados principalmente mediante fondos europeos Next Generation, junto con recursos propios de la Comunidad Autónoma.
Dentro de esta estrategia, se construirá un total de 25 nuevas instalaciones fijas destinadas a municipios con más de 5.000 habitantes y mancomunidades. Estas infraestructuras atenderán a 230 municipios y beneficiarán a una población superior a los 162.000 habitantes.
Actualmente, Castilla y León cuenta con 127 puntos limpios fijos censados. Con esta actuación, se añadirán 22 nuevas unidades y se renovarán 3 instalaciones obsoletas, mejorando así tanto el acceso como la calidad del servicio.
Para ello, la Junta ha desarrollado un Proyecto Básico Tipo, que contempla una recogida de hasta 33 fracciones de residuos, lo que supone un notable avance respecto a los estándares anteriores. El coste medio estimado por instalación oscila entre 480.000 y 580.000 euros, sumando una inversión global superior a 12 millones de euros para los ejercicios 2025 y 2026. El objetivo es que las obras estén finalizadas antes de junio de 2026.
A través de una Manifestación de Interés publicada en marzo, la Junta ha abierto una convocatoria de subvenciones directas dirigidas a titulares de puntos limpios que atiendan a más de 5.000 habitantes. El objetivo es facilitar su modernización, adaptándolos a los nuevos requisitos europeos y promoviendo la reutilización y reparación.
Hasta 80 instalaciones podrán beneficiarse de una línea de ayudas dotada inicialmente con 2,4 millones de euros. Entre los gastos subvencionables se incluyen:
Contenedores especializados
Sistemas de pesaje
Techado de zonas de almacenamiento
Control de accesos y videovigilancia
Formación del personal
Espacios habilitados para la reutilización
El plazo para presentar solicitudes finaliza el 25 de abril de 2025, y todas las actuaciones deberán completarse antes del 31 de mayo de 2026.
La tercera línea del plan apuesta por una solución adaptada a la realidad territorial de Castilla y León: los puntos limpios móviles. Esta modalidad ofrece una alternativa eficaz para garantizar la igualdad en el acceso a servicios públicos en áreas rurales y de difícil cobertura.
Se contempla la adquisición de entre 110 y 130 unidades móviles, junto con 45 a 50 vehículos eléctricos y la instalación de puntos de recarga rápida. El criterio de distribución atenderá tanto a factores poblacionales como geográficos.
La inversión prevista en esta línea asciende a casi 10 millones de euros. Las solicitudes pueden presentarse hasta el 20 de mayo de 2025, con la entrega de equipos programada para antes del 31 de mayo de 2026
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