El Área Metropolitana de Barcelona reclama al Ministerio para la Transición Ecológica actuaciones de emergencia para apaciguar la situación de vulnerabilidad extrema del litoral metropolitano
El Área Metropolitana de Barcelona (AMB) reclama al Ministerio para la Transición Ecológica pide aportaciones extraordinarias de arena antes del verano en todas las playas más afectadas por la regresión, con un tamaño adecuado y unos 50 metros de ancho que permitan soportar unos temporales cada vez más frecuentes, es decir, actuaciones de emergencia para apaciguar la situación de vulnerabilidad extrema del litoral metropolitano.
Actualmente ya se han perdido el 15% de las playas metropolitanas y todas sufren regresión, excepto la del Fòrum (Sant Adrià de Besòs). De hecho, algunas playas ya no se pueden recuperar de forma natural. Antonio Balmón, vicepresidente ejecutivo del AMB, explica que "las playas metropolitanas son el mejor patrimonio de espacio natural que necesitamos preservar. Pedimos trabajar conjuntamente con el Ministerio para la Transición Ecológica y la Generalitat de Catalunya para hacer una propuesta firme con el objetivo de evitar la erosión de estos espacios". "Reclamamos urgentemente una intervención del Ministerio a través de un plan de choque para realizar una reposición de las arenas", añade.
La Administración metropolitana ya está trabajando para impulsar el Plan de resiliencia de las playas metropolitanas, conjuntamente con las instituciones competentes: una hoja de ruta que determina diferentes propuestas y soluciones de ingeniería marítima a medio plazo que reviertan la regresión de las playas y protejan de forma definitiva el litoral metropolitano. En este sentido, el AMB lleva a cabo estudios previos del litoral metropolitano, que servirán como base de conocimiento para trazar el Plan. Este diagnóstico determinó que las playas del litoral metropolitano norte han perdido entre 6 y 10 metros anuales de ancho desde 2017.
La borrasca Celia ha provocado el mayor temporal marítimo de esta temporada en el litoral metropolitano, que ha empeorado el estado de unas playas ya muy vulnerables por la regresión y la pérdida de arena. El temporal marítimo, que se ha producido entre el lunes 14 y el viernes 18 de marzo, ha provocado oleadas de hasta 6 metros (según la boya de Puertos del Estado) y rachas de viento de hasta 70 km/h , procedente del este y el sudeste. Las olas se generaban en el norte de África y recorrían todo el Mediterráneo occidental hasta impactar en nuestras costas. Además, la presencia de las bajas presiones ha implicado una subida del nivel del mar, fenómeno que se conoce como "mareada ciclónica".
La pérdida de arena fue muy significativa en las playas de Montgat y Badalona norte, que ya se encontraban en un estado muy delicado antes de la llegada del temporal y la fuerte regresión sigue avanzando hacia el sur, donde la poca anchura de algunas playas provoca mayores impactos cuando hay oleaje fuerte.
Montgat: queda la playa de los Pescadors, que aguanta gracias al pequeño espigón de la colina de Montgat. Antes del temporal, ya habían desaparecido las playas de Les Roques, de los Toldos, Can Tano y Montsolís.
Badalona: este temporal ha hecho desaparecer la playa de Barca Maria. Las del Cristal y el Pont d'en Botifarreta han quedado bastante dañadas y el temporal ha hecho aflorar antiguas estructuras como cimientos de antiguas edificaciones.
El Prat de Llobregat: antes del temporal, ya habían desaparecido la playa La Naturista y parte de la playa de la Ricarda (unos 2 km de longitud). Este temporal ha hecho avanzar la regresión en Can Camins, que ya ha perdido 650 metros de longitud, a pesar de las aportaciones anuales de 100.000 m3 de arena que se realizan en esta zona.
Gavà: la playa de Gavà Mar ha perdido anchura y unos 300 metros de frente dunar. Sin embargo, las dunas metropolitanas de las playas del delta del Llobregat amortiguan el avance del temporal y minimizan las afectaciones en la parte trasera de la playa, ya que la parte del frente dunar actúa como una barrera flexible frente al oleaje y la subida del nivel del mar.
El AMB, dentro de las competencias de gestión integral de las playas metropolitanas, tiene el encargo de mantener, proteger y conservar estos espacios naturales. La creciente presencia de temporales y borrascas en el Mediterráneo ha implicado una planificación y reorganización exhaustivas para adaptarse a un nuevo escenario climático y minimizar las afectaciones en las playas metropolitanas.
Después del episodio el equipo de playas del AMB ha llevado a cabo una serie de actuaciones y tareas que tienen como objetivo limpiar el excedente de residuos, restaurar elementos desplazados o dañados, restablecer el mobiliario y los equipamientos fijos y adecuar los niveles de arena.
Antes del temporal ya se realizaba un protocolo de apertura de rieras y pluviales, para canalizar el agua hacia el mar y evitar inundaciones en la explanada arenosa y, aguas arriba, la retirada de mobiliario fijo durante la temporada baja, susceptible de sufrir daños. Durante el temporal se ejecutó un seguimiento y monitorización del oleaje, el viento y la lluvia; inspección continua del estado y evolución de las playas; balizamiento de elementos que hayan sufrido afectaciones, como plataformas de ducha que hayan quedado descalzadas y la retirada de elementos que no estaban en riesgo pero que la evolución del oleaje sí pone en peligro
La información más relevante del sector directamente en tu correo.
Suscribirme