Medio Ambiente

El Departamento de Gestión de Residuos, dirigido por Raimundo González Carballo, ha comenzado la colocación y distribución de nuevos contenedores marrones y calderos a establecimientos comerciales que participan en el Plan Composta, un programa experimental para recolectar desechos biológicos en tiendas y hogares privados de una ruta preestablecida. a través de contenedores marrones colocados en las islas de reciclaje de la ciudad.

El Ayuntamiento ha colocado contenedores marrones de 700 litros en la calle con un dispositivo de cierre automático que le permitirá abrirse a todas las personas que participan en el plan y que tienen la tarjeta "compuesta" para abrirlo. También distribuirá 125 cubos de 90 litros, 500 cubos de 45 litros y 2.400 cubos de 7 litros. Los dos primeros están diseñados para establecimientos comerciales y/o para hogares particulares. Todos recibirán bolsas compostables y una tarjeta llave para depositar la basura en la papelera.

El viernes, también comenzó la distribución de información en todos los hogares de personas en la ruta. Y a partir del lunes, comenzarán las visitas cara a cara a los hogares que durarán hasta finales de septiembre, ya que el pronóstico es hacer unas 3.500 visitas.

La campaña de sensibilización en los hogares comenzará con la Plaza de la Peregrina como punto central, y desde allí se extenderá al resto de las calles. 

Campaña de sensibilización

Composta es un programa experimental de recolección de residuos orgánicos en hogares y productores únicos en la ciudad. Es la tercera ruta del programa de compostaje (junto con el plan individual y comunitario) voluntario y completamente gratuito, que recogerá los desechos orgánicos depositados en el contenedor marrón por una parte de la ciudad donde no hay opción para el tratamiento individual o el compostaje colectivo. 

El medio disponible para Composta es un camión de recolección específico, entre 4 y 5 trabajadores exclusivamente para este servicio experimental. 

El Plan Compost se lanza con una extensión del contrato con la concesionaria, Cespa, que en el primer año invierte 540,000 euros (440,000 euros + 99,000 euros para el tratamiento de residuos en la planta de compostaje) y en el segundo 458,000 euros (358,000 euros + 99,000 tratamiento ) La continuidad del proyecto ya estaría enmarcada dentro del futuro contrato de la basura de Pontevedra.