Entrevista a Victor Sarabia, Director General de Servicios de Limpieza y Residuos del Ayuntamiento de Madrid
La ciudad de Madrid redobla su apuesta por los servicios urbanos que velan por una ciudad limpia, sostenible y verde. Para ello, desde el Ayuntamiento se ha puesto en marcha recientemen los nuevos servicios de limpieza viaria y gestión de las zonas verdes de la ciudad, divididos en seis lotes, y con una inversión nunca antes vista que sustentará un amplio y consistente impulso a la eficiencia, los recursos humanos y la tecnología.
Tras la pasada experiencia de los contratos integrales, diseñados en un contexto de grave recorte presupuestario y en una situación diferente a la actual, los nuevos servicios han abandonado la gestión por resultados y la evaluación mediante indicadores.
Se han establecido unas prestaciones de obligada realización y los medios necesarios para realizarlas, estableciendo de esta manera el núcleo central del servicio: su día a día a lo largo de todo el año, y se ha dejado en manos de la experiencia e innovación de los licitadores el perfeccionar esos servicios y proponer mejoras en ellos. Para ello, en los criterios de adjudicación se otorgaba el 50% de la puntuación a criterios no valorables en cifras o porcentajes y se establecía una fórmula muy progresiva para la valoración de la baja económica.
Finalmente, la forma de controlar los servicios ha pasado a hacerse mediante un específico régimen de incumplimientos y penalizaciones contractuales, cuya existencia y procedimiento están sustanciados por normas con rango de ley, frente al anterior sistema de evaluación de cumplimiento y pago por objetivos, que no tiene un procedimiento establecido por Ley y presentaba una muy elevada litigiosidad, una extraordinaria dificultad de gestión y unos malos resultados.
En estos contratos existen unos servicios obligatorios. Se establecen los que deben ser prestados en cada zona y la frecuencia con que deben prestarse. Ahora existen cuatro niveles de tratamiento y a cada lugar se le asigna uno, en función de sus necesidades y de sus características. Las frecuencias tienen un aumento muy considerable y, como consecuencia, también lo tienen las plantillas necesarias, que experimentan fuertes incrementos.
Además, en limpieza se recuperan las campañas de refuerzo como la de la hoja y Navidad y se activan equipos para atender incidencias y avisos las 24 horas del día. Estas campañas y estos equipos se diseñan igualmente con unos medios mínimos obligatorios, para saber exactamente con qué se cuenta a la hora de planificar las actuaciones.
Se establece asimismo que las ausencias por vacaciones tienen que cubrirse, evitándose de este modo la grave carencia de personal en periodo de verano que se ha sufrido con los anteriores contratos que, al no establecer un personal adscrito al servicio, tampoco obligaban a que se cubrieran las vacaciones. Al tomar un trabajador su necesario descanso, no había nadie que le sustituyera y la carencia de personal era grave. Esto ya ha dejado de ser así.
"Los nuevos servicios abandonan la gestión por resultados y la evaluación mediante indicadores".
Se apuesta también por los vehículos y maquinaria, para los que se establece una renovación completa, con la incorporación de más modernas unidades, de mayores prestaciones y rendimientos y con motorizaciones basadas en fuentes de energía limpias: se apuesta fuertemente por la electricidad y el gas natural comprimido en detrimento del Diesel Euro VI, que queda relegado a los vehículos y máquinas para los que actualmente no existe una alternativa suficientemente contrastada.
Este incremento en plantillas y maquinaria, con incorporación de nuevas formas de energía, hace absolutamente imprescindible adaptar las infraestructuras del servicio, por lo que en el contrato también se contempla un completo Plan de Cantones, con la construcción de dos nuevas bases para cada distrito y la remodelación de todas las existentes.
Finalmente se incrementan los medios y se mejoran los procedimientos de cara a los eventos meteorológicos adversos, se refuerza el Plan Nevada, se mejora la potencia de servicio, la coordinación con el SELUR y se establecen medios específicos para desinfectar las calles, si fuera necesario.
Se busca priorizar uno de los servicios básicos fundamentales para la vida en la ciudad, competencia propia e indelegable del Ayuntamiento. La limpieza de calles y plazas es la que procura, junto con la recogida de residuos, que estos espacios estén siempre en las debidas condiciones de higiene y ornato, previendo la aparición de plagas y vectores de transmisión de enfermedades.
Se busca colocarlos en el lugar que les corresponde, dotándoles de un presupuesto que permita que puedan hacer frente tanto a las necesidades ordinarias como a las extraordinarias que puedan surgir. La pandemia de la Covid19 y la nevada “Filomena” han puesto palmaria y dolorosamente de manifiesto este hecho: la limpieza era, junto con la recogida de residuos, uno de los servicios municipales que estaban en la calle, facilitando que los madrileños pudieran proteger su salud quedándose en sus casas. Son servicios fundamentales y como tales deben considerarse.
Se busca establecer un marco claro de gestión que permita la prestación del servicio y su control sin ambigüedades, estableciendo explícitamente lo que se debe hacer y los medios mínimos necesarios para hacerlo, y dotar por fin al servicio de una red de infraestructuras acordes con su importancia. No se puede gestionar un servicio de primer nivel con la red de cantones decrépita y marginal con la que se viene contando hasta ahora. Es necesario construir una buena cantidad de instalaciones modernas y remodelar completamente las existentes, muy anticuadas.
"Las frecuencias tienen un aumento muy considerable y, como consecuencia, también lo tienen las plantillas".
En ambos casos existen unas prestaciones definidas y los servicios se dotan de maquinaria no contaminante. Se definen todas las actuaciones a desarrollar a lo largo del año, desde los barridos manuales a los baldeos, pasando por los riegos, las siegas y las podas, hasta los novedosos barridos mixtos duales, en los que se emplea agua para soplar en lugar de aire, con lo que se elimina el polvo en suspensión.
Se intensificarán las tareas en las zonas verdes de viernes a domingos y festivos. También se obligará a realizar la recogida y retirada de residuos de forma selectiva, aspecto que tampoco cubría el anterior contrato integral. Los residuos deberán entregarse en el Parque tecnológico de Valdemingómez separados en las distintas fracciones.
Todos los vehículos y maquinaria del servicio deberán ser de nueva adquisición y revertirán al Ayuntamiento al finalizar el plazo. Predominan las motorizaciones eléctricas y de gas natural comprimido, la maquinaria deberá emitir un nivel bajo de ruido, de emisiones y de consumo, además de utilizar combustibles menos contaminantes. Además, la maquinaria de jardinería deberá utilizar lubricantes rápidamente biodegradables y que no sean potencialmente bioacumulativos o aceites regenerados.
En ambos servicios se contará con un equipo de guardia las 24 horas del día los 365 días del año, para resolver las incidencias y atender los avisos ciudadanos o, en el caso de zonas verdes, los que puedan requerir los cuerpos y fuerzas de seguridad, los servicios de emergencias u otros servicios municipales. En el caso de limpieza esta tarea está encomendada al SELUR.
"La pandemia y Filomena han puesto de manifiesto que la limpieza es, junto con la recogida de residuos, uno de los servicios municipales que estaban en la calle, facilitando que los madrileños pudieran proteger su salud".
Otra de las novedades es la reducción a la mitad de los tiempos para la retirada de los residuos que se abandonan indebidamente en la vía pública y en el entorno de contenedores, teniendo que ser recogidos regularmente y no pudiendo permanecer en el espacio público más de tres horas en horario de 7:00 a 24:00 h. En el servicio actual se establece un máximo de cuatro horas para el distrito de Centro y seis para el resto de la ciudad.
Se incorpora, además, una recogida programada mensual de muebles y enseres de particulares en la vía pública un día fijo a la semana para cada una de las zonas del distrito. La empresa dispondrá de los medios necesarios para avisar al vecindario de este servicio mediante acciones informativas previas y específicas para cada sector en el que se vaya a realizar.
Por primera vez, las adjudicatarias deberán contar con 14 camiones nebulizadores para la limpieza y desinfección de las calles en caso de estado de alarma sanitaria o similar y con 52 mochilas nebulizadoras de espalda.
En lo que se refiere a la gestión de las inclemencias invernales, el nuevo contrato contiene una prestación específica en medios y procedimientos en el caso de nevadas, un aspecto que el anterior no contemplaba. Se exige a cada contratista tener un sistema predictivo de análisis y toma de decisiones en vialidad invernal sobre la base de mapas térmicos. Cada adjudicatario deberá realizar este mapa de su ámbito incluyendo el estudio y análisis de las temperaturas de las principales calzadas. Los datos deberán permitir su integración con el resto de las zonas de la ciudad y obtener un mapa único. Con esta información se podrán señalar las zonas críticas donde existe una mayor probabilidad de heladas o nevadas, lo que implicará un uso más eficiente tanto de los recursos como de los fundentes.
"El nuevo contrato contiene una prestación especÍfica en medios y procedimientos en el caso de nevadas, un aspecto que el anterior no contemplaba".
Dentro La Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 la sostenibilidad juega un papel fundamental. La sostenibilidad es transversal en el contenido y desarrollo de ambos servicios, y está en la base de la utilización de tecnologías, combustibles y lubricantes limpios y en la obligación de separar en las distintas fracciones los residuos generados y de entregarlos separadamente para su gestión.
En lo que se refiere a las instalaciones, la sostenibilidad y la minimización de la huella de carbono están en la base de la elección de diseños. La eficiencia energética, la construcción de techos y paredes ajardinados, la utilización de materiales renovables, la implantación de placas solares o de dispositivos de depuración y reutilización del agua de lluvia son algunas de las medidas que se van a tomar. Todas las nuevas instalaciones contarán además con zonas verdes.
Es importante recalcar, por su gran alcance, la obligación de separación de los residuos generados. Todo el personal, desde los barrenderos a los jardineros, podadores y segadores, tendrán la obligación y contarán con equipos de separación de residuos, los vehículos y maquinaria tendrán compartimentos diferenciados y en las instalaciones habrá equipos para separar residuos. Esto sin duda será una importante contribución para el cumplimiento de los objetivos comunitarios en materia de gestión de residuos.
En los nuevos servicios se apuesta tanto por un incremento en el número de equipos, de un 16% aproximadamente, como por una renovación total de la flota con incorporación de motorizaciones eléctricas y de gas. Las etiquetas 0 y ECO van a ser las predominantes, y la etiqueta C y el Diesel Euro VI quedarán prácticamente relegados a aquellos casos en los que no exista una alternativa suficientemente contrastada.
Al igual que con el contrato de limpieza municipal, todos los vehículos y maquinaria del servicio deberán ser de nueva adquisición. Se exige a los vehículos de menos de 3.500 kilos que tengan etiqueta CERO emisiones o ECO y los de más de 3.500 kilos podrán ser CERO, ECO o C.
"La tecnología tendrá un papel muy relevante".
La tecnología tendrá un papel muy relevante, puesto que los nuevos servicios incorporan un completo sistema de localización y de gestión de flotas. Destaca también el papel de los operarios como detectores de incidencias, que se transmitirán instantáneamente a su base de operaciones para que se activen los servicios correspondientes. También es destacable la importancia que se asigna a los sistemas predictivos, desde el ya mencionado para la vialidad invernal hasta los sistemas de predicción de la caída de hojas y semillas en función de la climatología y del tipo de árbol.
Siempre lo son, y ahora más si cabe. Los servicios de limpieza de conservación de zonas verdes son intensivos en mano de obra, y así debe ser. La maquinaria y la tecnología dan potencia al servicio, pero sigue siendo el barrendero y el jardinero el que lleva la base del día a día del servicio. Así nos lo han pedido los madrileños durante estos ocho años: querían ver más barrenderos en las calles. Ahora los ven, y además en muy breve plazo estarán equipados con unos medios y tecnologías mucho más eficientes, como los modernos carritos con apoyo eléctrico, que en breve estarán plenamente en funcionamiento.
Durante los años del contrato integral, se han tomado cientos de miles de muestras para comprobar el estado de la ciudad. Se trata de información valiosa que no debe perderse y a la que hay que dar una continuidad, aunque ya no se utilice para determinar la cantidad a pagar al prestador del servicio.
La oficina de control de calidad se va a encargar, fundamentalmente, de monitorizar el estado de la ciudad para dar datos objetivos de su estado, generando cuadros de mando que permitan a los gestores del servicio detectar posibles problemas y anticipar las medidas necesarias. También realizarán un importante apoyo en el análisis de la gran cantidad de datos que van a generar estos nuevos servicios, dando directrices y recomendaciones para la mejora de los mismos.
Madrid es una de las ciudades del mundo con más calles arboladas. Más del 50 % de sus vías públicas tienen ejemplares en alcorques, traduciéndose en 2.600 kilómetros con diferentes especies. En total, la capital posee casi dos millones de árboles de titularidad municipal y 6.300 hectáreas de zonas verdes, lo que equivale a 20 m2 por habitante. Esta gran arboleda tiene sus efectos positivos en la belleza de la ciudad, la calidad del aire y, de manera directa, en la salud de sus vecinos. Por esta razón, con el nuevo servicio de zonas verdes su mantenimiento y conservación está asegurada en unos niveles mejorados respecto al contrato anterior.
Para ello, y a partir de ahora, el servicio contemplará explícitamente los planes directores de los parques con los que se pretende impulsar una conservación de las zonas verdes y el arbolado en favor de la maximización de los servicios ecosistémicos que prestan y la mejora de la biodiversidad con criterios de sostenibilidad, funcionalidad y resiliencia. Para ello, se perseguirán los Objetivos de Desarrollo Sostenible fijados por Naciones Unidas y la Unión Europea en relación con el cambio climático, el consumo de energía, la calidad del aire, los residuos, la economía circular y la biodiversidad.
"El servicio contempla explícitamente los planes directores de los parques para impulsar una conservación de las zonas verdes y el arbolado que maximice los servicios ecosistémicos que prestan".
El contrato establece que se incrementará el tamaño mínimo de los árboles a plantar (16-18 cm de perímetro frente a los 14-20 del contrato anterior) y los destoconados (eliminación del tronco talado) se deberán realizar en un plazo de 15 días hábiles. Madrid disminuirá con este nuevo servicio la huella hídrica y de carbono que genera esta actividad en línea con los principios de mitigación y adaptación a los efectos del cambio climático.
También se reutilizarán e incorporarán los restos de siega y de poda al espacio del que se han extraído en línea con los principios de economía circular, salvo casos excepcionales y justificados por los servicios técnicos municipales.
Se va a renovar por completo el parque de vehículos y maquinaria, y la electrificación va a pasar a tener un papel esencial. La flota va a pasar a ser mucho más respetuosa con el medio ambiente de lo que era antes. Asimismo, la tecnología y la digitalización van a pasar a ser mucho más relevantes, por ejemplo, a la hora de elegir con criterios objetivos las especies para plantar mediante el apoyo de herramientas informáticas.
En lo que se refiere al riego, como no puede ser de otra manera, se va a tecnificar y se van a incorporar las mejoras disponibles para optimizar la eficiencia y el ahorro en el uso del agua, primando la regenerada frente a la potable siempre que sea posible. Para ello la mejora de los sistemas, los cálculos de las necesidades y el control del gasto serán las herramientas fundamentales.
Se incrementará la eficiencia en el uso de recursos, de las instalaciones y del servicio: se potenciará el ahorro de agua, se minimizará el consumo con sistemas economizadores de agua en las infraestructuras de riego utilizadas, se utilizarán las mejores tecnologías en temporizadores y sistemas de control de fugas, entre otros equipos.
"Se va a renovar por completo el parque de vehÍculos y maquinaria, y la electrificación va a pasar a tener un papel esencial. La flota va a pasar a ser mucho más respetuosa con el medio ambiente".
Cuando sea posible se empleará agua no potable, se instalarán los sistemas de riego más eficientes y además se aplicarán diferentes medidas para reducir la demanda de agua: acolchado (mulching), disposición de las plantas según sus necesidades hídricas, selección de plantas ornamentales adaptadas o autóctonas, disposición de las plantas según sus necesidades hídricas o selección de plantas ornamentales adaptadas o autóctonas, entre otras.
Madrid fomentará las especies de árboles y arbustos que sirvan de alimento, refugio y cría para la fauna. No se podrán plantar especies exóticas invasoras o con potencial invasor y se procederá a la sustitución progresiva de las especies exóticas invasoras ya implantadas cuando se realicen trabajos de renovación de las zonas verdes existentes. Se favorecerán las praderas naturales de menor consumo de agua en detrimento de las superficies de césped.
La nueva concepción del mantenimiento de las zonas verdes y el arbolado viario municipales establece entre sus principios generales la prohibición de utilizar productos químicos de síntesis como herbicidas y abonado químico, o de fungicidas e insecticidas para acabar con plagas, salvo casos excepcionales en los que estén justificados por los servicios técnicos municipales. Se emplearán métodos de control biológico de plagas, enfermedades y especies herbáceas no deseadas (comúnmente denominadas malas hierbas).
Por primera vez, se incluye en el pliego el control de la oruga procesionaria y la galeruca o escarabajo del olmo mediante métodos selectivos como el control manual y/o mecánico, la endoterapia o cualquier otro tratamiento fitosanitario que se ajuste a lo reflejado en el RD 1311/2012 por el que se establece el marco de actuación para conseguir un uso sostenible de los productos fitosanitarios. También se utilizará la lucha biológica contra el resto de las plagas.
Podemos esperar una mejora en la limpieza de la ciudad y en la conservación de sus zonas verdes, con unos servicios más modernos y respetuosos con el medio ambiente, integrados en la estrategia Madrid 360 y más acordes con las necesidades y tendencias actuales, tanto en su sostenibilidad como en su versatilidad y en la gestión de los residuos generados, clave en la economía circular.
Entrevista publicada en el número 198 de Equipamiento y Servicios Municipales.
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