Cada malagueño separó para su posterior reciclaje 12,2 kg de envases de plástico, latas y tetrabriks en el contenedor amarillo y 13,9 kg de envases de papel y cartón en el azul
Los malagueños depositaron en los contenedores amarillos y azules un 3% más de envases con respecto al año 2019. En este sentido, los contenedores amarillos fueron los que mayor crecimiento experimentaron, llenándose un 5,7% más que en 2019. Esto fue posible gracias a que cada malagueño depositó en ellos 12,2 kilos de envases de plástico, metálicos y tetrabriks. En el caso del contenedor azul, la aportación de los malagueños alcanzo los 13,9 kilos de envases de papel y cartón por ciudadano.
Los datos alcanzados en 2019 confirman la tendencia ascendente seguida por ciudad de Málaga en esta materia. De hecho, en los últimos cinco años, el uso del contenedor amarillo y azul se ha incrementado, de media, un 30%. Estos datos han sido dados a conocer por marcha por la empresa municipal Limpieza de Málaga SAM (Limasam) y Ecoembes.
La concejala de Servicio Operativos y responsable de Limasam, Teresa Porras; destaca que “la preocupación de la ciudadanía malagueña por conservar su entorno natural es cada vez mayor. Se demuestra porque cada vez más los que pasan a la acción para aportar su granito de arena en este propósito”. Desde Ecoembes señalan que “para hacerlo posible, los malagueños confían en el reciclaje como una de las herramientas con las que contribuir al cuidado del medioambiente, consolidándose como la práctica ambiental más extendida”.
Tanto desde Limasam como desde Ecoembes sostienen que lograr estos datos es posible con la participación activa de todos los actores que forman parte del ciclo del reciclaje: El ciclo empieza cuando los malagueños separan sus envases para depositarlos en uno de los 3.410 contenedores amarillos y azules que hay en la ciudad, así como en los distintos puntos de reciclaje situados fuera del hogar. Ejemplo de ello, es la colaboración con los 606 los establecimientos HORECA (hoteles, restaurantes y cafeterías) con la recogida selectiva en ciudad, mostrando así su compromiso con el medioambiente y con los consumidores.
Del mismo modo, destacan las acciones de concienciación puestas en marcha a través de la campaña escolar “Ecoresiduos… reduce y separa” desarrollada en los centros educativos de la ciudad de Málaga y la campaña “Ecoilógicos” en prensa escrita y digital, televisión y radio.
En el año 2020, los ciudadanos se han enfrentado con una situación totalmente nueva y llena de incertidumbre para todos y, sin embargo, el compromiso ciudadano con la recogida selectiva y el reciclaje durante esta situación tan excepcional ha sido ejemplar. La actual crisis ha demostrado no solo la fortaleza de un sistema de reciclaje que no ha dejado de funcionar en ningún momento, sino también la firmeza del compromiso medioambiental de la ciudadanía de Málaga.
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