Urbanismo

El Ayuntamiento de Bilbao acaba de culminar las obras del espacio cubierto con juegos infantiles y zona polivalente en la Plaza Andalucía, en San Ignacio, en su límite con el barrio de Elorrieta, junto a su conexión con el paseo de la Ría.

Con esta actuación –que ha abarcado también la reurbanización del entorno de la cubierta–, se pretende dotar a la ciudadanía de un lugar dinámico, que pueda albergar gran variedad de usos y se convierta en un punto de encuentro para vecinas y vecinos, de todas las edades, y que pueda ser disfrutado con independencia de las condiciones climatológicas.

Para ver el resultado de los trabajos, recién finalizados, se han acercado hasta la Plaza Andalucía el Alcalde de Bilbao, Juan Mari Aburto, el concejal del Área de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos, Asier Abaunza, y otros miembros de la Corporación Municipal.

Se trata de una doble intervención: la instalación de la cubierta y la urbanización de su entorno y la ejecución del área infantil en el interior de la cubierta.

Unos trabajos que se han desarrollado durante los últimos ocho meses y que han supuesto una inversión municipal de casi un millón de euros: 843.344,70 euros destinados a la cubierta y su entorno y 133.740,10 euros para la zona de juegos cubiertos.

La cubierta y su interior

Dentro de la cubierta se pueden distinguir tres espacios diferenciados, con posibilidad de funcionar de forma independiente. Para ello, la estructura cuenta con cuatro puertas abatibles y cuatro correderas, que permiten el uso y la relación de las diferentes zonas.

El primero de los espacios es un área polivalente de 244 metros cuadrados, destinada a actividades de barrio de distinta naturaleza. Cuenta con una preinstalación eléctrica y wifi para permitir el desarrollo de eventos con necesidades audiovisuales. También dispondrá de mobiliario estancial.

En segundo lugar, se ha ejecutado un área dedicada a parque infantil cubierto, con una superficie total de 350 metros2. En ella se han habilitado juegos para niñas y niños –de hasta doce años de edad– que permiten la interacción con la propia estructura de la cubierta a través de elementos como cuerdas o redes, además de toboganes tubulares, trepas verticales o juegos de escalada entre otros. También se ha dispuesto un pavimento de caucho azul que simula la orografía del fondo del mar. En esta zona se ha colocado asimismo mobiliario destinado para la estancia de aitas, amas o personas al cuidado de las y los más pequeños.

Se ha hecho un esfuerzo por conseguir que los juegos sean inclusivos y accesibles. Tal es así que incluyen paneles sensoriales. Los de balanceo se han colocado a una altura y con unas características que permiten su utilización por todas y todos; y, las cuerdas permiten trabajar la movilidad.

Por último, en el espacio intermedio entre el área polivalente y la infantil, se ha generado un patio de unión y relación entre ellas, donde se ha dispuesto vegetación y mobiliario urbano.

La cubierta se compone de una estructura portante de madera contralaminada y placas de anclaje metálicas que se insertan en el alma de la estructura y forman dos coronas circulares concéntricas. Todo ello se ata a través de una subestructura tubular metálica y la fachada se resuelve con lamas de policarbonato compacto de acabado opal y transparente, adaptándose a la forma y dando sentido al conjunto. El acabado opal se sitúa en la zona alta, para evitar la radiación solar excesiva y conseguir la entrada de luz natural, y el transparente en la zona baja para permitir la entrada de iluminación natural. Tanto en la parte transparente como en la opal se han dispuesto lamas que permiten la entrada de aire fresco y la salida de aire caliente.

Por su ubicación estratégica, en un entorno junto a la Ría y el Anillo Verde, se ha buscado que la cubierta tuviera un diseño especial. La estructura de madera simula las cuadernas invertidas de una embarcación, es decir, las costillas de madera, que paralelas y separadas entre sí van encajadas perpendicularmente en la quilla, formando la estructura soporte del casco. Y los elementos de juego, incluso los cabos y redes marinas de la estructura, simulan el fondo marino.

La cubierta tendrá un horario controlado de apertura y cierre. Se abre a las 9:00 horas y se cierra a las 22:00 horas.

Entorno de la cubierta

Con la instalación de la cubierta se refuerza la importancia de la plaza como corazón del barrio de San Ignacio-Elorrieta y se otorga a las y los vecinos el protagonismo del nuevo espacio generado.

De hecho, toda la urbanización del entorno se ha diseñado acorde a los accesos y usos de la propia cubierta. Así por ejemplo, el bidegorri se ha desviado para adaptar su trayectoria a la curva exterior de la instalación; y también algún parterre ha tenido que ser modificado y, en consecuencia, se ha adaptado la red de riego –bien modificándola bien incluyéndola en aquellos puntos en los que no existía–.

Alrededor de la cubierta se ha ejecutado un paseo perimetral de 3 metros de anchura mínima. Los pasos de peatones se han mantenido, al igual que la plaza que alberga la cubierta, donde se han respetado los árboles de la urbanización previa y recuperado los alcorques existentes.

La zona de juegos contigua, ubicada al otro lado del bidegorri, ha sido también modificada. Se retiraron los elementos existentes –conservados en perfecto estado–, el pavimiento de goma y el vallado perimetral y se ha definido un nuevo espacio rectangular en lugar de circular como el anterior. Éste ha sido repavimentado y en él se han recolocado los elementos de juegos y el mobiliario urbano. En total, este espacio pasa de los 200 metros cuadrados preexistentes a los 228 metros cuadrados actuales.

Los trabajos de la Plaza Andalucía han implicado asimismo el desvío y renovación de las canalizaciones y redes afectadas así como la reposición de los elementos urbanos del ámbito y la pavimentación de la urbanización.

Plan Auzokide

Los trabajos proyectados en la Plaza Andalucía se enmarcan en el Plan Auzokide para la mejora de los barrios de la ciudad.

Se trata de es una de las herramientas más importantes de participación ciudadana con la que cuenta el Ayuntamiento de Bilbao. En virtud de la cual, el presupuesto es repartido por igual entre los 8 distritos de Bilbao, a razón de 1,5 millones de euros por distrito y año.