Infraestructura verde

El Ayuntamiento de Girona y la Universidad de Girona (UdG) están testeando nuevos modelos de siega y siembra para los parques y jardines de la ciudad con el objetivo de mejorar la biodiversidad urbana. Se trata de una prueba piloto, en el marco del proyecto GiroNat, a través de la cual se pretende evaluar los efectos sobre la biodiversidad que pueden tener actuaciones como la reducción de siegas o la siembra de semillas de prado mediterráneo, entre otros.

La actuación, que se ha iniciado este mes de junio, pretende garantizar en los prados y campos de césped de la ciudad una floración más rica en especias, abundante y prolongada en el tiempo, lo que beneficiará a la presencia de un número más elevado y diverso de polinizadores

Para llevar a cabo la acción, se han instalado parcelas de muestreo en distintos puntos con césped de la ciudad como el parque Central de Rafael Masó y Valentí, el jardín de la Pau y el castillo de Montjuïc. Estos sitios servirán para evaluar la presencia de especies y su evolución durante el estudio.

Parque Central de Rafael Masó y Valentí

Diferentes personas investigadoras de la UdG realizarán este seguimiento de la flora y fauna para valorar la efectividad de las acciones. Se trata de un proyecto de interés científico sobre la biodiversidad florística y faunística urbana cuyos resultados servirán para establecer protocolos de gestión de los espacios verdes urbanos del territorio. Además, este trabajo se convertirá en una herramienta para la transición socioecológica.

Además del cambio de régimen de siegas y la siembra de semillas mediterráneas, se prevé llevar a cabo otras actuaciones como la creación de balsas temporarias, la construcción de hoteles de insectos, la construcción de muros de piedra seca y cambios en la gestión de los restos vegetales, entre otros, con el objetivo de mejorar la biodiversidad de los espacios naturales de Girona.

GiroNat es un proyecto compartido de ciudad, perdurable y demostrativo, que impulsa la biodiversidad y la infraestructura ecológica como ejes vertebradores de un giro de 180 grados hacia una renaturalización urbana, transformando Girona en una ciudad más verde, resiliente y saludable. El proyecto propone una transformación urbana que dé respuesta a los retos y oportunidades que afronta Girona como ciudad mediterránea, universitaria y educadora, socialmente diversa, fluvial y cercana a la naturaleza.

El proyecto, que cuenta con una subvención de los fondos europeos Next Generation, está coordinada por el Ayuntamiento de Girona y cuenta con el apoyo de la Universidad de Girona y de las entidades ambientalistas Asociación La Sorellona, ​​Asociación Red por la Conservación de la Naturaleza, SEO Birdlife (Sociedad Española de Ornitología) y la Fundación Instituto Catalán por la Investigación del Agua (ICRA).