Medio Ambiente

El Ayuntamiento de Girona ha iniciado la licitación para la instalación de placas fotovoltaicas en cinco edificios municipales: el Pabellón municipal de Vila-roja, la Escuela Font de la Pólvora, la Piscina Municipal de Palau y la Piscina Municipal de Santa Eugenia - Can Gibert del Pla. El importe de licitación de los equipos de generación eléctrica y su correspondiente mantenimiento por un período de tres años asciende a 508.138,87 euros (IVA incluido).

El proyecto de instalación de las placas solares dotará a los edificios de capacidad para producir electricidad para su propio consumo. La previsión es que los cinco edificios generen 376 kW de energía. Desglosado por instalaciones, las dos que generarían más energía son las del Mercado del León y la de la Piscina Municipal de Palau, con 100 kW cada una; seguido de la del Pabellón municipal de Vila-roja (80 kW) y de la de la Escuela Font de la Pólvora (60 kW). Por último estaría la instalación de la Piscina Municipal de Santa Eugenia - Can Gibert del Pla, que generaría 36, ​​teniendo en cuenta que el complejo ya dispone de una instalación de energía solar para el agua caliente sanitaria. La producción de esta energía por medio de una fuente renovable haría reducir la huella ecológica del consistorio en 150 toneladas de Co2 por año.

El concejal de Urbanismo y Actividades del consistorio, Lluís Martí, ha destacado que con este paso adelante, el proyecto está más cerca de ser una realidad en los próximos meses: “ Es importante tener operativas otras fuentes de suministro de energía, y más en el actual contexto de lucha contra el cambio climático; por eso desde el gobierno somos proactivos en este impulso de las energías renovables desde el compromiso de ser más eficientes energéticamente. Además, también queremos destacar, por un lado, que estas instalaciones de energía verde permitirán garantizar el autoconsumo de los equipamientos e incluso llegar a compartirlo con otros edificios cercanos en función de las necesidades y, por por otro lado, que hemos planificado la actuación en barrios diferentes, de modo que el impacto de estas instalaciones se noten en el conjunto de la ciudad”.

Los criterios seguidos a la hora de escoger los edificios donde instalar las placas han sido, por un lado, la eficiencia fotovoltaica de la cubierta -que ofrezca una orientación óptima y sin zonas de sombra- y, por otro, el consumo energético de las propias instalaciones. En este caso se trata de espacios con una demanda de electricidad muy elevada y, por tanto, se prevé reducir significativamente su gasto energético.

Esta intervención se enmarca en el Plan de Acción para la Energía Sostenible (PAES) de Girona para el fomento de las fuentes de energía renovables y las tecnologías de mejora de la eficiencia energética.