Medio Ambiente

El informe de la AEMA "Adaptación urbana en Europa" destaca la urgente necesidad de adaptar las ciudades europeas al cambio climático y ofrece una visión general de las medidas que están adoptando. El informe proporciona una rica fuente de información para apoyar las políticas de adaptación climática en toda Europa, desde el nivel de la UE hasta el municipal.

A medida que las ciudades europeas sienten cada vez más los impactos del cambio climático, como olas de calor e inundaciones, hay motivos claros para invertir en la resiliencia de la sociedad urbana, afirma el informe de la AEMA. Las ciudades tienen un papel esencial en la implementación de acciones de adaptación, que deben tener en cuenta las condiciones locales y las vulnerabilidades específicas.

Las ciudades europeas se están adaptando al cambio climático a través de una amplia gama de acciones efectivas, que incluyen planificación urbana y códigos de construcción, incentivos económicos y seguros, sistemas de alerta temprana y campañas de información.

Las áreas emergentes de oportunidad para la adaptación incluyen la promoción de la agricultura urbana, la creación de espacios públicos más habitables y la protección del patrimonio cultural

Adaptación urbana en Europa: ¿qué funciona? 

También están implementando cada vez más soluciones basadas en la naturaleza , que están incluidas en el 91% de los planes de adaptación locales analizados en el informe. Las soluciones basadas en la naturaleza son efectivas para enfriar y retener agua en las ciudades, y también brindan muchos otros beneficios, como espacio para recreación y reducción de la contaminación. Sin embargo, debido a la magnitud de los impactos climáticos esperados, aún puede ser necesario combinar enfoques basados ​​en la naturaleza con otros tipos de acciones, incluida la infraestructura física, señala el informe de la AEMA.

El informe de la AEMA destaca varias condiciones propicias para una adaptación exitosa. Estos incluyen un compromiso político sostenido que a menudo está vinculado a una financiación adecuada a largo plazo, una buena gobernanza y la participación de los ciudadanos locales, el aprendizaje de otras ciudades y la toma de decisiones basada en el conocimiento.

El informe destaca que se requiere adaptación en todos los sectores y en todos los niveles de gobernanza, y que las acciones deberán abordar los impactos climáticos actuales y proteger contra mayores riesgos futuros. El informe de la AEMA también destaca que si se quieren ampliar adecuadamente las acciones tomadas a nivel local, se necesitan objetivos mucho más tangibles para medir el progreso. Actualmente, sólo el 2% de los indicadores utilizados para el seguimiento en los planes de adaptación locales están vinculados a una meta de adaptación específica.

En marzo, la AEMA publicó la primera evaluación europea de riesgos climáticos, lo que demuestra que las políticas y acciones de adaptación actuales de Europa no están a la altura de los riesgos climáticos en rápido crecimiento. Según el informe, las zonas urbanas densamente pobladas corren un riesgo especial de sufrir olas de calor y precipitaciones extremas.