Medio Ambiente

Sant Cugat es hasta el 22 de marzo, uno de los municipios metropolitanos que participan en la prueba piloto del proyecto europeo Nanosat AQM Interreg Sudoe, liderado por el AMB, AIGUASOL y la Generalidad de Cataluña. La iniciativa permitirá medir la calidad del aire en movimiento a través de nanosensores instalados en bicicletas y en personas que tengan una rutina de ir en bici o caminar diariamente.

El proyecto Nanosat AQM Interreg Sudoe está destinado a impulsar nuevas tecnologías en el campo de la calidad del aire. Previsto para 2020 y aplazado por la situación epidemiológica, se desarrollará simultáneamente en diferentes regiones europeas a lo largo del primer trimestre de 2021. Dentro de los municipios metropolitanos, también se harán pruebas en L'Hospitalet de Llobregat y Sant Adrià de Besòs.

El papel del AMB en este proyecto es obtener datos (mediante los nanosensores) de la presencia de los principales contaminantes atmosféricos que afectan al territorio metropolitano (CO2, NO2, O3, PM10 y PM2,5).

Objetivos y funcionamiento

La finalidad es ver la fiabilidad de estos sensores en movimiento y medir la contaminación en diferentes puntos del municipio a través de los voluntarios que llevarán los sensores: 2 voluntarios que se desplazarán a pie por el municipio y llevarán el sensor en el cinturón y 4 voluntarios que se desplazarán en bicicleta por el municipio y llevarán el sensor fijado al manillar de la bicicleta. También habrá un sensor ubicado en un elemento municipal de la Rambla del Celler y sensores en la estación fija de la Red de Vigilancia y Previsión de la Contaminación Atmosférica (XVPCA) de la Generalidad de Cataluña situada en el parque de San Francisco de Sant Cugat del Vallès.

La naturaleza de esta prueba piloto permitirá al AMB recoger un conjunto de datos mucho más variado que el que se obtiene de las estaciones fijas, ya que los nanosensores estarán en movimiento y permitirán conocer la calidad del aire en diferentes emplazamientos , como espacios naturales, agrícolas, industriales o zonas urbanas. Estos datos se integrarán en una plataforma creada expresamente por varias universidades portuguesas que también participan en este proyecto europeo.

Gracias al proyecto, el AMB podrá conocer de primera mano los últimos avances e innovaciones en el ámbito de los nanosensores aplicados al análisis de la contaminación atmosférica, así como las tecnologías de futuro relacionadas con la mejora de la calidad del aire. También se podrá elaborar un mapa de puntos especialmente conflictivos en que se puedan aplicar medidas adicionales: conversión de calles en zonas peatonales, zonas de bajas emisiones, fomento de los desplazamientos a pie o bicicleta, promoción del vehículo eléctrico, puntos de recarga y campañas de sensibilización y educación dirigidas a la ciudadanía.

El AMB lidera la lucha contra la contaminación atmosférica en la metrópolis de Barcelona

La contaminación del aire, provocada en gran parte por el tráfico rodado, traspasa las fronteras locales y es un grave problema presente en las grandes conurbaciones urbanas y metrópolis del mundo, también en el área metropolitana de Barcelona

Para mejorar la calidad del aire, que afecta directamente a la salud pública de los 3,2 millones de habitantes de la metrópolis de Barcelona (integrada por 36 municipios), el AMB lidera una ambiciosa estrategia de lucha contra la contaminación atmosférica: con una total complicidad y trabajo con los ayuntamientos metropolitanos, está diseñando y poniendo en marcha nuevos servicios y herramientas e implementando medidas destinadas a rebajar notablemente los niveles de concentración de partículas en suspensión (PM2,5 y PM10) y de dióxido de nitrógeno (NO2) en la metrópolis, que a menudo superan los umbrales establecidos por la Unión Europea (UE) y la OMS.