Smart Cities

Un nutrido grupo (cerca de medio centenar) de estudiantes de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Minas de la Universidad de Vigo se desplazó hasta Cerceda (A Coruña) para conocer las instalaciones que conforman el complejo medioambiental de Sogama y tomar buena nota del proceso industrial desarrollado en las mismas.

El colectivo fue atendido en todo momento por personal técnico al servicio de la empresa pública. Así, tras unas breves explicaciones iniciales, los universitarios tuvieron la oportunidad de realizar un recorrido guiado por las distintas plantas a través de las cuales discurre la basura, que es reciclada o recuperada energéticamente.

Tras visualizar el funcionamiento de la nave automatizada de clasificación, donde se separan por tipologías los materiales que conforman la denominada bolsa amarilla (envases de plástico, latas y briks depositados por los ciudadanos en los contenedores amarillos de recogida selectiva), y que son remitidos a los centros de reciclado para ser transformados en nuevos productos, los universitarios se adentraron en el itinerario que sigue la conocida como bolsa negra (basura en masa introducida en los recipientes verdes convencionales). De esta forma pudieron comprobar los sistemas utilizados en la segregación de la parte susceptible de ser reciclada (acero, aluminio y vidrio) y el acondicionamiento, con la fracción restante, de un combustible derivado de residuos (CDR) que es valorizado en la planta termoeléctrica para su transformación en energía eléctrica. De hecho, la electricidad producida en Sogama resulta suficiente para abastecer una ciudad como Vigo, pudiendo llegar a cubrir el 11 por ciento de la energía consumida en los hogares gallegos durante un año.

Con la ampliación de sus instalaciones, la Sociedad recuperará el plástico y el papel/cartón contenidos en el residuo genérico, incrementando con ello las tasas de reciclado y minimizando el vertido en un 30 por ciento.