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La implantación de sistemas eficientes es clave para alcanzar los índices europeos de reciclaje

Artículo de Isaac Peraire Soler, Director de la Agencia de Residuos de Catalunya

La implantación de sistemas eficientes es clave para alcanzar los índices europeos de reciclaje
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Tenemos grandes retos, Europa exige que en 2025 el reciclaje de residuos sea del 55%, lo que supone que deberemos tener una recogida selectiva superior al 60%. Necesitamos que los sistemas de recogida selectiva sean cada vez más eficientes, ya sea con puerta a puerta o con contenedores inteligentes.

 

En Cataluña, en la gestión de residuos estamos trabajando en una buena dirección pero todavía hay mucho trabajo por hacer y hay que mejorar mucho. Aun así, el recorrido que se ha hecho en materia de ordenación y aseo de la gestión de los residuos, desde que se promulgó la primera ley de residuos de Cataluña en el año 1.993, es muy grande y debe ponerse en valor.

Hoy en día, por poner algunas cifras, en residuos municipales, estamos en un 46,6% de recogida selectiva; en residuos industriales, podemos decir que un 80% se destina a procesos de valorización y, en los residuos procedentes de la construcción, el índice de valorización se sitúa en el 61,4%.

Tenemos grandes retos, Europa exige que en 2025 el reciclaje de residuos sea del 55%, lo que supone que deberemos tener una recogida selectiva superior al 60%. Necesitamos que los sistemas de recogida selectiva sean cada vez más eficientes, ya sea con puerta a puerta o con contenedores inteligentes. Estamos dedicando esfuerzos desde la administración, en nuestro caso impulsando las ayudas necesarias para hacerlo posible.

De los residuos debemos hablar de forma abierta, transparente y debemos verlos como fuente de recursos que son, debemos actuar con prevención (evitar el exceso de generación), facilitando su reutilización e incrementando su valorización material, todo con una visión hacia el residuo cero y la economía circular.

 

De los residuos debemos hablar de forma abierta, transparente y debemos verlos como fuente de recursos que son facilitando su reutilización e incrementando la su valorización material.

 

La mayor parte de la ciudadanía sabe perfectamente cómo separar los residuos, lo que pasa es que el acto de depositar la basura ha sido siempre voluntario y anónimo, y el voluntarismo, lo hemos visto del 2010 en adelante, si hacemos un vistazo a la evolución de la recogida selectiva en Cataluña, ha tocado techo con el modelo actual de contenedor abierto en la vía pública. Las encuestas nos indican que todo el mundo conoce que es necesario separar en casa las diferentes fracciones, incluso la orgánica que ha sido la última fracción al incorporarse al sistema.

 

 

Es necesario que los municipios implanten sistemas de recogida selectiva que sean más eficientes, y lo que tenemos muy bien constatado es que la individualización de la recogida, por familias o por viviendas, es lo que realmente funciona. Hemos llegado ya en Cataluña a los 300 municipios con modelo puerta a puerta, y hay previstas unas 150 implantaciones más a lo largo de los próximos 2/3 años. Los contenedores cerrados con abertura mediante tarjeta o código es otra opción eficiente que se está abriendo paso. Y ahora lo que hace falta verdaderamente es que estos sistemas se implanten en las grandes ciudades.

 

 

Estos sistemas tienen una tecnología que permite identificar si el ciudadano o ciudadana separa o no la basura, con lo que se puede ajustar el recibo o tasa a la separación que se realiza en origen.

 

El acto de depositar la basura ha sido siempre voluntario y anónimo, y el voluntarismo ha tocado techo con el modelo actual de contenedor abierto en la vía pública.

 

La sociedad catalana es crítica y comprometida. Seguro que aún puede serlo más, y hay que orientar la conciencia especialmente a reducir la generación de residuos. En Cataluña, se generan anualmente 4.000.000 toneladas de residuos domésticos, el equivalente a llenar de basura doce estadios del Barça.

Y la gente debe saber que cuando hablamos de la reducción de la generación de residuos no sólo nos referimos a qué podemos hacer como ciudadanía, sino también que es necesaria una transformación verde del sector productivo para generar menos residuos. La ciudadanía tiene derecho a comprar con elementos reutilizables y tiene derecho a poder reparar los productos que compra con todas las facilidades posibles.

Desde la Agencia, trabajamos para alcanzar acuerdos con los distintos sectores productivos para fomentar la circularidad. Recientemente hemos participado en el impulso del Pacto por la Moda Circular con más de 70 agentes del sector con las intenciones de reducir entre un 5% y un 10% la generación de residuo textil y alcanzar entre un 25% y un 30% de recogida selectiva (actualmente, el valor es casi un 12%, bajo).

Debemos hacer ver a la ciudadanía que son agentes activos para el cambio, para cambiar el modelo de consumo y que desde el sector productivo se abren alternativas más sostenibles, y desde las administraciones ofrecemos sistemas de recogida y gestión eficientes, que faciliten a la ciudadanía el esfuerzo que realizan en la separación de los residuos.

Las diversas unidades de la Agencia de Residuos de Cataluña trabajan en multitud de proyectos relacionados con los residuos, iniciativas europeas y de todo el arco mediterráneo para promover el compostaje de los residuos domésticos (proyecto SIRCLES), proyectos para estudiar cómo aplicar tasas justas y sistemas de pago por generación y por participación para mejorar la gestión de los residuos municipales (proyecto Rethinkwaste), proyectos por sensibilización para la prevención de residuos como la Semana Europea de la Prevención de Residuos (con más de 1.100 acciones en Cataluña).

Estamos trabajando para impulsar la reparación y la reutilización, por ejemplo, el Plan de Acción para la Competitividad de los Centros de Reutilización en Cataluña, que surge de la participación de la ARC en el proyecto europeo Interreg Subtract. Se incluyen 80 proyectos que se implantarán durante 2022 con el objetivo de convertir los talleres y tiendas de productos de segunda mano en negocios viables ambiental y económicamente que ofrezcan puestos de trabajo estables. O el proyecto Generació RESET que es una acción dentro del mundo educativo que busca fomentar la reparación y correcta gestión de los teléfonos móviles. Los talleres prácticos de este proyecto nos demuestran la gran capacidad que tienen este tipo de aparatos de ser reparados para que puedan ser de nuevo útiles.

 

Propuestas para avanzar en Catalunya

En el ámbito normativo, el principal proyecto que tenemos entre manos es la aprobación de la nueva ley de residuos y recursos que pretendemos aprobar a lo largo del año.

Es una ley que quiere ser valiente, pionera en muchos puntos para impulsar la economía catalana hacia una economía más circular y eficiente en el uso de los recursos. No tenemos tiempo que perder, el cambio debe ser ahora.

 

En el ámbito normativo, el principal proyecto que tenemos entre manos es la aprobación de la nueva ley de residuos y recursos que pretendemos aprobar a lo largo del próximo año, una ley que quiere ser valiente, pionera en muchos puntos para impulsar la economía catalana hacia una economía más circular y eficiente en el uso de los recursos.

 

Estamos de lleno en el siglo XXI. Ya no son válidos los antiguos paradigmas de usar-tirar, y las montañas de residuos sin reciclar deben ser cosa del pasado. En Cataluña, ya hemos hecho muchos cambios hacia la sostenibilidad y ahora, con la nueva ley de residuos, queremos hacer aún más. Entender los residuos no como algo desagradable que debe hacerse desaparecer a cualquier precio, sino como un recurso valioso que se puede recuperar para volver a entrar en el ciclo productivo.

La nueva ley de residuos de Cataluña pretende incorporar el horizonte residuo cero y un nuevo sistema productivo basado en la economía circular, que garantice el uso racional de los recursos y priorice los productos y sistemas de reciclaje y reutilización.

En el ámbito de planificación, el plan de desmantelamiento de las incineradoras existentes en Cataluña, el plan de gestión de residuos y el plan territorial de infraestructuras son prioridad en el orden del día.

Por otra parte, todas las iniciativas y acuerdos en relación con la prevención de generación de residuos son también una prioridad. En el campo municipal, estar junto a los entes locales para la mejora de la recogida selectiva a trevés del despliegue de sistemas eficientes de recogida.

Contribuir al convertir a Cataluña en un país libre de amianto, formando parte de la comisión interdepartamental del Gobierno de la Generalitat que lidera este objetivo es también una prioridad.

Por último, también quiero destacar el hecho de promover la igualdad en el sector de residuos, tenemos un sector donde sólo uno de cada cinco puestos de trabajo son ocupados por mujeres. Esto significa que sólo el 19% de las mujeres ocupa empleo en empresas del sector. Es por eso que estamos poniendo en marcha actuaciones que sirvan justamente para revertir esta situación.


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