Medio Ambiente

Luís Almeida Capão es el presidente de la Associação Limpeza Urbana, una asociación para ciudades más inteligentes y sostenibles, que actualmente celebra su cuarta reunión en Loulé (Portugal). Tras haber llevado el año pasado a más de 800 personas a Braga para visitar el congreso y la exposición, propone para este año un formato de conferencia en el que se podrá escuchar a expertos de Harvard, Estocolmo o Barcelona, entre otros.

La Asociación de Limpieza Urbana se creó en 2019 en Portugal. ¿Qué ha cambiado en Portugal, en este ámbito, gracias a su acción?

Ha cambiado la percepción pública sobre la limpieza urbana y ha modificado la agenda política. Por ejemplo, sólo el año pasado, debido a nuestra acción, se presentó el primer Estudio de Caracterización del Sector en Portugal. Las cifras apuradas muestran que se trataba de una parte oculta que tiene aproximadamente el mismo valor añadido bruto que el sector de la recogida de residuos: unos 468 millones de euros.

Gracias a este y otros trabajos, nos convertimos rápidamente en interlocutores de la administración central para los documentos estratégicos nacionales, como el Reglamento General de Residuos, recientemente revisado, y el PERSU 2030, por ejemplo. Conseguimos que se consideraran medidas de inversión relacionadas con este ámbito para sensibilizar y formar a los recursos humanos.

Las ONG también cuentan con nosotros y esperamos llegar pronto también al mundo académico

¿Qué tiene de especial la ALU para lograr tanto en tan poco tiempo?

Lo que más nos distingue es que no somos sólo una red de ciudades, no sólo reunimos municipios. Queríamos innovar incluso en nuestra forma de gobierno y decidimos reunir a todos los actores del sector. Tenemos entre nuestros miembros la administración local, desde los ayuntamientos hasta las juntas parroquiales, tenemos empresas públicas y empresas privadas, desde proveedores de contenedores hasta prestadores de tecnología y big data. Como resultado, tenemos una noción holística de la actividad, remamos como un todo. La única forma de dinamizar el sector es afrontar los retos juntos y lo estamos consiguiendo.

Los días 3 y 4 de noviembre se celebrará el 4º Encuentro Nacional de Limpieza Urbana (ENLU). ¿Cuáles son las razones para acudir a esta reunión?

La limpieza urbana tiene un gran impacto en todos los aspectos de la vida de las personas. Las políticas de gestión territorial deben integrar la Limpieza Urbana en la planificación y las estrategias de movilidad, si estos territorios quieren desarrollarse de forma equilibrada y sostenible, si quieren atraer población cualificada y establecer empresas con valor añadido. La limpieza urbana es hoy un factor de creación y fijación de riqueza, es innegable. La 4ª ENLU es la oportunidad de conocer a los mejores especialistas en esta materia, más de 40, procedentes de ciudades como Harvard o Estocolmo, con experiencia comprobada en este ámbito. Se trata de un foro de aprendizaje, que incluye también el acercamiento a las tecnologías más avanzadas en este ámbito. Llevo varios años trabajando en el sector de la limpieza urbana, estoy atento a la innovación y sigo sorprendiéndome cuando veo estas presentaciones.

La limpieza urbana depende de la legislación nacional y de las normativas municipales. ¿Por qué iba a ir un municipio español a una reunión portuguesa?

En Portugal hay 308 municipios y, como puede imaginar, no todos son iguales. Nuestros miembros de la administración local son muy diferentes entre sí: tenemos municipios del interior, de la costa y de las islas, del norte, del centro y del sur, territorios plenamente urbanos y otros con baja densidad de población, presupuestos generosos y otros que hacen milagros con las dotaciones que tienen para la limpieza urbana. Sin embargo, todos tenemos una necesidad cada vez más acuciante de gestionar eficazmente los recursos de que disponemos, lo que implica necesariamente la automatización de los procesos, la lectura inteligente de los datos y la puesta en común de conocimientos y recursos. Un gestor público español, un concejal o un técnico pueden acudir al encuentro con las mismas expectativas que un portugués: escuchar a los mejores, inspirarse, aumentar su red de contactos para el desarrollo de ideas y, quién sabe, de colaboraciones. Lo cierto es que la Asociación de Limpieza Urbana empezó por mirar de cerca a la Association Des Villes Pour La Propreté Urbaine. No hay nada malo en repetir lo que funciona, es mejor que empezar de nuevo. Ahorramos recursos y tiempo.