Esta cifra se mantiene por debajo de la media catalana, que es de un 42%, y está lejos aún del objetivo del 50% de reciclaje establecidos Europa a los países miembros para el año 2020
El director de la Agencia de Residuos de Cataluña, Josep Maria Tost, ha presentado los datos de generación y tratamiento de los residuos municipales en el ámbito metropolitano, que incluye el Alt Penedès, Baix Llobregat, Barcelonès, Garraf , el Maresme, el Vallès Occidental y el Vallès Oriental, correspondientes al año 2018. la recogida selectiva en estas comarcas se ha incrementado 2 puntos. El año 2018 fue de un 38%, mientras que el año 2017 había sido de un 36%. Esta cifra es inferior a la media catalana, que es del 42%, y está lejos aún del objetivo de un 50% de reciclaje establecidos Europa a los países miembros para el año 2020. Además, para Tost, "no nos podemos quedar con el objetivo del 50%, tenemos que ir más allá, mirar hacia el futuro".
La comarca que más residuos domésticos ha recogido selectivamente en este ámbito sigue siendo, otro año, el Maresme. El año 2018 tuvo un índice de recogida selectiva de un 45,3%. Esta cifra es superior a la obtenida en 2017, que fue un 43,63%, con un incremento del 1,67%. Tres comarcas (el Baix Llobregat, Alt Penedès y el Maresme) superan la media catalana de recogida selectiva.
Por el contrario, el territorio que hace menos recogida selectiva es el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) con un 36,1%. La AMB la integran 36 municipios pertenecientes a las comarcas del Barcelonès, Baix Llobregat, Maresme, y el Vallès Occidental.
El año 2018 se generaron 2,4 millones de toneladas de residuos municipales en la región metropolitana. La generación per cápita se situó en 1,3 kg/hab./Día. Por debajo de la media catalana, que es de 1,43 kg/hab./Día. Respecto al año anterior, la generación aumentó, pasando de 459 kg/hab./Año a 475 kg/hab./Año. La comarca que genera más residuos per cápita es el Garraf, con 618 kg/hab./Año, y la que menos, el Vallès Occidental, con 428 kg/hab./Año. El Garraf, Maresme y Alt Penedès se sitúan por encima de la media de Cataluña.
La población de las comarcas que integran este ámbito es de unos 5 millones de habitantes, lo que representa más del 67% de la población de Cataluña. Los 2,4 millones de toneladas de residuos municipales que se generaron en 2018 representan el 61% de los residuos municipales generados en Cataluña. En envases, de las 143.800 toneladas recogidas en Cataluña el año 2018, 84.700 se recogieron selectivamente en este ámbito, lo que representa el 59% de los envases recogidos selectivamente en todo el país. En cuanto a la fracción resto-la que no se recoge de forma selectiva-, se generaron 1,5 millones de toneladas, el 65% de esta fracción en Cataluña.
En resumen, dado el peso de las comarcas de la región metropolitana en la población de Cataluña, un incremento de la recogida selectiva en esta parte del territorio haría crecer sustancialmente la media de la recogida selectiva en Cataluña. Las cinco ciudades más pobladas del país se encuentran en este ámbito, con los siguientes porcentajes de recogida selectiva: Barcelona, 38%; L'Hospitalet de Llobregat, 24,6%; Terrassa, 38,5%; Badalona, 27%; y Sabadell, 33,6%.
Para aumentar los índices de recogida, Tost apuesta por "establecer un sistema de tasa justa para que aquellas personas que separen bien la basura sean premiadas". En la mayor parte de los núcleos de población del ámbito metropolitano hay anonimato a la hora de depositar la basura en los contenedores. Hay un sistema de recogida selectiva tradicional, de contenedores ubicados en la vía pública y de cinco fracciones. Y los índices de recogida son más bien bajos. En cambio, los municipios con un modelo individualizado de gestión de la basura, en el que se recoge selectivamente puerta a puerta en los domicilios o con contenedores cerrados en la vía pública y tarjetas personales para la ciudadanía, tienen resultados de recogida selectiva elevados.
Precisamente para aumentar la recogida selectiva, y "romper el techo de cristal del 40%", explicó el director de la ARC, "después del trabajo hecho en sensibilización y de las campañas institucionales, ahora, la clave es el bolsillo". "El canon sobre la deposición controlada de los residuos municipales se incrementa el próximo año alrededor del 5%, llegando a los 47 euros por tonelada destinada al vertedero ", explicó Tost. "La previsión", adelantó, "es que, en 2024, el canon llegue a los 72 euros la tonelada", de manera que los entes locales deberán emprender acciones decisivas para aumentar la fracción recogida de manera selectiva.
La Comisión Europea establece que los países miembros deberán haber llegado en 2020 a un objetivo de un 50% de reciclaje sobre los residuos generados. Un objetivo que incrementa gradualmente cada cinco años hasta el 2035. Así, en 2025 habrá que llegar a un 55% de reciclaje, en 2030 un 60% y en 2035 un 65%. Aparte, el año 2035 no se podrá destinar más del 10% de los residuos domésticos en depósito controlado.
Un aumento del número de toneladas de fracción orgánica recogidas selectivamente, la elaboración por parte de los municipios de planes específicos de recogida selectiva a los grandes productores de residuos (hoteles, restaurantes, campings, etc.) y el análisis del modelo de recogida selectiva para establecer cómo se pueden mejorar los índices, mejorando el propio modelo o eligiendo otro, ya sea a una parte del municipio o en el conjunto, son políticas municipales que habría que llevar a cabo.
Puede consultar el detalle de la recogida de los residuos municipales del año 2018 para todas las comarcas y municipios al web de la Agencia de Residuos de Cataluña.
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