Medio Ambiente

Lleida ha iniciado los trabajos que permitirán disponer por primera vez en la ciudad de un Plan de Espacios Verdes, en el que se establecerán las características que deben tener todas las zonas verdes de la ciudad para aportar mejoras tanto a los servicios a la ciudadanía, como la conectividad entre los diferentes espacios verdes y la mejora y preservación de la biodiversidad. El plan abarca tanto el casco urbano como los agregados de Sucs, Raimat y Llívia, y también la Huerta de Lleida, poniendo también en valor su función como espacio verde territorial.

Los parques, las plazas, las calles arboladas, los huertos urbanos, las azoteas verdes, el río, los espacios naturales y la Huerta son una parte de la naturaleza que entra en la ciudad. El objetivo del plan es diseñarlos para que acojan flora y fauna de interés, ofrezcan sombra y confort, contribuyan a regular el microclima y generen una verdadera red verde que permita desplazarse por la ciudad siguiendo corredores verdes.

El estudio, que se prevé que esté terminado en enero de 2021, pretende conservar y mejorar el patrimonio natural de la ciudad, evitando la pérdida de especies y habitats, alcanzar el máximo de superficie verde y la mejor conectividad, y obtener los máximos servicios ambientales y sociales del verde y la biodiversidad, avanzando al mismo tiempo en el valor que la sociedad asigna a estos elementos. "Afrontamos un trabajo riguroso que no sólo permitirá mejorar los espacios verdes y la biodiversidad de Lleida, sino que nos permite hacer una ciudad más resiliente ante los retos emergentes como el cambio climático" ha resumido el concejal de Transición Ecológica, Sergi Talamonte.

El Plan de los Espacios Verdes de Lleida contará con un proceso participativo para conocer la percepción de la población y se plantea como un documento de análisis, ordenación, planificación, diseño de espacios modelo y definición de las conexiones de los espacios verdes de Lleida, que establecerá las bases para maximizar las funciones principales de estos espais. Entre ellas destacan la capacidad para reducir el efecto de la isla de calor urbana, mejorar la calidad del aire, aumentar la biodiversidad urbana, mejorar el confort de las calles y el paisaje urbano, permitir la penetración de la huerta en la ciudad, conectar el espacio urbano y el territorio, contribuir a la conservación de la biodiversidad y aumentar la salud y el bienestar de los ciudadanos y ofrecer nuevas oportunidades deintegración social y de participación ciudadana en la mejora del espacio público.

El plan del verde se nutrirá también del Plan del arbolado, que se está realizando y que recogerá el estado de los árboles del municipio, la evolución que han tenido en los últimos años y las posibles mejoras a implementar. Para hacer los trabajos de este estudio se ha contratado la cooperativa El Risell, una licitación que ha tenido un coste de 13.500 €, IVA no incluido.