Infraestructura verde

Logroño ha dado un paso firme hacia un modelo de ciudad más sostenible, autosuficiente y saludable con la presentación en Pleno de su ambiciosa Estrategia de Ciudad Circular. Con esta hoja de ruta, el Ayuntamiento aspira no solo a reducir el consumo de recursos naturales y la generación de residuos, sino también a avanzar hacia la neutralidad climática y consolidarse como la capital española con más espacios verdes por habitante.

El documento, presentado por el equipo de Gobierno municipal y diseñado a partir del análisis de los recursos e infraestructuras específicas de Logroño, plantea acciones concretas que abarcan todo el ciclo de uso de materiales, energía y agua.

“No se trata solo de crear un anillo verde de 27 kilómetros que abrace la ciudad”, explicó el alcalde Conrado Escobar, “sino de entender Logroño como un sistema circular, donde todo recurso se reutiliza y se valora”.

Una estrategia basada en seis ejes clave

La Estrategia Logroño Circular se estructura en torno a seis ejes estratégicos: minimización de recursos naturales, gestión del consumo de agua, sostenibilidad urbana, fomento de conductas saludables, políticas transversales y eficiencia energética. Estos pilares sostienen una visión integral del desarrollo urbano que supera el concepto de sostenibilidad tradicional para adentrarse en la circularidad plena.

Escobar, durante su intervención, se dirigió a los alumnos del programa Centros Educativos hacia la Sostenibilidad (CEHS), quienes han colaborado con propuestas concretas para la Estrategia. 

“Este es un Pleno que mira al futuro, que piensa en la ciudad que queremos construir entre todos”, afirmó Escobar, reconociendo las aportaciones de estos jóvenes.

Además, Escobar agradeció las iniciativas de los jóvenes y las aportaciones recogidas en el documento.

Objetivos medibles y compromiso con el bienestar

La estrategia incluye metas cuantificables que reflejan el compromiso real del Ayuntamiento con la transición ecológica y la mejora del entorno urbano. Entre los objetivos más destacados se encuentran:

• Reducir el consumo de carburantes en 200.000 litros anuales.
• Ahorrar 385.000 m³ de agua potable al año.
• Alcanzar cerca de un millón de m² de superficie verde.
• Crear hasta 55 kilómetros de carriles ciclopeatonales, saludables y sostenibles, que conecten los parques de la ciudad.
• Optimizar el control de fugas de agua y transformar el alumbrado urbano con luminarias eficientes, lo que podría suponer un ahorro de hasta 2 millones de euros anuales.

El alcalde también subrayó que una ciudad circular debe ser una ciudad más saludable, donde el entorno urbano contribuya al bienestar emocional de los vecinos.

“Queremos una ciudad en un parque, porque la salud también tiene que ver con poder pasear por zonas verdes, con respirar aire limpio y con consumir productos de kilómetro cero, que es lo más sostenible”, concluyó el alcalde.