Movilidad

Madrid estrena 12 nuevos puntos de recarga eléctrica rápida y con ellos ya suma 45 en total de acceso público (31 en suelo público y 14 en suelo privado). Entre enero y abril, el Área de Medio Ambiente y Movilidad que dirige Borja Carabante ha aumentado en un 36 % los puntos de recarga rápida, pasando de 33 a 45. Contando con los puntos de recarga lenta, los madrileños disponen de 153. A estos se suman los 261 puntos de recarga para la flota municipal, que no son de acceso público.

Esta mañana el delegado del Área de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante, ha visitado una de las nuevas ubicaciones, situada en la plaza de la Lealtad, alimentada con energía eléctrica de origen 100 % renovable. Carabante ha resaltado el compromiso del Ayuntamiento de Madrid con el medioambiente y la transición hacia una movilidad sostenible, “nos hemos marcado el propósito de ampliar la red hasta alcanzar los 150 puntos de recarga rápida en 2023”.

Gracias al convenio de colaboración entre el Ayuntamiento de Madrid con IBIL Gestor de Carga del Vehículo Eléctrico S.A. y Gestión Inteligente de Cargas S.L. (GIC), el Ayuntamiento concede a los operadores la autorización y ellos se encargan de la acometida eléctrica y gestionan el punto de recarga, asumiendo el coste de la energía eléctrica. Están obligados a asegurar el funcionamiento óptimo de los puntos y la energía debe provenir de fuentes 100 % renovables. El precio de recarga está establecido en 45 céntimos por kilovatio.

Uno de los objetivos recogidos en la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 es impulsar la red de recarga rápida de acceso público y, para ello, en enero se firmaron convenios de colaboración con las principales empresas de distribución eléctrica, UFD, i-DE y Red Eléctrica de España, para colaborar en el proceso de transición hacia un modelo energético sostenible y descarbonizado. Recientemente, la Empresa Municipal de Transportes e i-DE han firmado un acuerdo para asesorar y facilitar la electrificación de la red de autobuses urbanos, así como para planificar una red de puntos de recarga para vehículos eléctricos en aparcamientos y espacios públicos gestionados por la EMT.

El compromiso del Ayuntamiento de Madrid con la electromovilidad queda patente con las últimas medidas que ha adoptado como la puesta en marcha de la Línea Cero de la EMT; la compra de 15 nuevos autobuses eléctricos; la creación del primer aparcamiento de vehículos compartidos junto a IFEMA; la ampliación, este año, de 50 nuevas estaciones de BiciMad y la autorización del despliegue de hasta 4.800 bicicletas eléctricas de uso compartido gestionadas por operadores privados, entre otras iniciativas.