Urbanismo

Nou Barris ha celebrado este sábado la fiesta de reapertura de la plaza Sóller y la inauguración del nuevo espacio La Bòbila después de su reforma y ampliación. El proyecto ha dotado al equipamiento de una nueva volumetría y criterios de sostenibilidad y eficiencia energética, con el objetivo final de que se convierta en un polo de atracción y actividad para los vecinos y vecinas del entorno. Además de la ampliación del equipamiento, se ha reubicado el acceso principal para hacerlo accesible desde la plaza. También se ha cambiado de sitio la escalera exterior para potenciar la conexión peatonal con el espacio ajardinado.

Para la inauguración de La Bòbila y de la plaza Sóller, reabierta el pasado 11 de noviembre, la jornada se ha iniciado con una actuación de Kangeroo Bollywood en el espacio central de la plaza y un matinal de actividades de las diversas entidades del barrio, como una ludoteca en la plaza, trabajos manuales con AFA Palma de Mallorca, un mercado de ropa de segunda mano y juegos de mesa y de geocaching. Posteriormente, ha tenido lugar la animación de calle 'Circus Freak Show', de Infestum Espectacles, y los parlamentos de la concejala presidenta del Consejo de Distrito, Gemma Sendra Planas; la Teniente de Alcaldía, Janet Sanz; la presidenta de la Federación Transforma Porta, Viginia Bueno Lluch, y el concejal del distrito, Xavier Marcé.

Después de la inauguración, se celebró una comida a cargo de la Fundación Jovent, un bingo musical, la sesión musical con la Banda Sinfónica de Roquetes y por la tarde la actividad 'Caldo por el frío' y los conciertos de la Tumultuosa, The Goliards Collective y PD Resident, entre otros.

La Bòbila es un equipamiento de gestión cívica que, a través del proyecto del Ateneo y el Casal de Jóvenes de Porta, plantea un proceso de dinamización y de organización de la comunidad con el objetivo de abordar e impulsar acciones que promueven la mejora de la calidad de vida del vecindario, suscitando la participación de la población en la construcción de una visión común de la realidad, compartida con los servicios del territorio, a fin de impulsar acciones conjuntas; y por otro, dinamizar y promover las relaciones de cooperación entre los distintos actores del territorio. El desarrollo comunitario del barrio de Porta (y de Nou Barris) es uno de los objetivos fundamentales de la Bòbila, así como el hecho de impulsar iniciativas que dinamicen el barrio a escala social, económica,

El trabajo en red es una de las señas de identidad del proyecto La Bòbila. Ésta fue la apuesta que motivó la creación de la Federación Transforma Porta, que está integrada por la Asociación de vecinas y vecinos de Porta; el Agrupamiento Scout Cruz del Sur; la Asociación en defensa de la vivienda 500×20; la Asamblea de paros y parados de Nou Barris; la Asociación de Familias por la Salud Mental de Nou Barris (AFEM); Puerta Cultural; Mujeres Porteñas; Òmnium Cultural Nou Barris; el Club Petanca Alcúdia; los huertos comunitarios Llévame al huerto y Can Valent, y el Casal de Joves Porta.

La inauguración de La Bòbila va de la mano de la reapertura a mediados de noviembre de la plaza Sóller. La plaza es ahora un nuevo parque verde de referencia en Porta, con nuevas zonas de estancia que invitan al paseo y que mejoran la permeabilidad y accesibilidad de la plaza con las calles que la rodean. Pese a su posición estratégica en el barrio, la edificación que le rodeaba y aislaba de su entorno la hacía una plaza poco permeable que no participaba de los recorridos cívicos del barrio. El centro de la plaza se ha convertido en un gran espacio de uso polivalente y de relación, desde donde se tiene acceso directo a las aceras perimetrales y la red de caminos de la plaza. Otro elemento importante es el lago central que enriquece la biodiversidad del espacio urbano. A su alrededor se ha generado un espacio en forma de prado de césped que conecta con la gran plaza.

Pese a su posición estratégica en el barrio, debido a la edificación que le rodeaba y aislaba de su entorno, suponía una plaza poco permeable que no participaba de los recorridos cívicos del barrio. El interior de la plaza se dividía en tres espacios claramente diferenciados: la gran plaza, el lago y el bosque. Los tres fragmentaban el espacio dificultando la conexión de actividades entre ellos. Con la nueva reurbanización, se han generado distintas zonas de estancia con nuevo mobiliario urbano. Este espacio cuenta con una zona de práctica deportiva con mesas de ping pong y una pared de escalada; un área de recreo para perros de más de 500m2; un área de juegos infantiles para todas las edades; un espacio polivalente de relación tipo ágora para poder organizar eventos y actos de pequeño formato; una zona de picnic;

En cuanto a la vegetación, se han conservado el arbolado existente a la vez que se han aumentado las capas de arbustos o el arbolado de hoja caduca con el objetivo de generar espacios de sombra en verano y soleados en invierno. La presencia de vegetación con floración permite mostrar el paso de las estaciones y caracteriza a las diferentes partes del parque.

Las obras de transformación de la plaza Sóller se iniciaron en agosto de 2019, con una duración prevista de 15 meses, y se han visto afectadas por el paro de las obras debido a la cóvid-19. La inversión total ha sido de 4,5 millones de euros.