Medio Ambiente

El Ayuntamiento de Sevilla, a través de Lipasam y del Distrito Casco Antiguo, han iniciado esta semana la retirada programada desde principios de año del sistema de recogida neumática de residuos de El Salvador, Cerrajería y Entrecárceles con el objetivo de adecuar el sistema a las necesidades de la zona dado que el uso mayoritario es el hostelero (que no usa estos buzones), donde hay una reducida recogida de residuos de residentes y son constantes los problemas por la ubicación y el funcionamiento.

Esta medida estaba programada para la Semana Santa, periodo en el que siempre se retiran de forma temporal, y se pretendía aprovechar para la suspensión definitiva. No obstante, ante la suspensión de las fiestas mayores de la ciudad este año por la crisis sanitaria por la COVID-19 esta retirada provisional no se produjo y se ha optado por realizarla esta semana de acuerdo con lo programado. En total, se están retirando los ocho buzones ubicados en El Salvador, otro en Cerrajería y el último en El Salvador además del punto de succión.

Al estar inmersos aún en estado de alarma, Lipasam y el Distrito Casco Antiguo han acordado aplazar la campaña de información y sensibilización y, por tanto, la entrega de los cubos individuales en los edificios de residentes hasta que se levanten las restricciones. Por este motivo, de forma temporal se instalarán en estas zonas contenedores para residuos de carga lateral que serán eliminados cuando se hayan podido realizar las acciones informativas y la entrega de los cubos individuales.

Este sistema solo debe ser usado por los residentes. Sin embargo, en gran parte de la zona donde está instalada esta red abundan los comercios y negocios de restauración, que deben gestionar la retirada de sus residuos a través de la recogida puerta a puerta, ya sea de la fracción resto (mediante cubos de uso individual), papel y cartón (mediante recogida manual en la puerta de los negocios) o vidrio (mediante cubos de uso individual). Esto provoca que toda la red de recogida neumática recoja en torno a 1.000 kilos al día, el equivalente a una población de mil habitantes, una cantidad muy pequeña teniendo en cuenta la superficie que abarca la red.

El sistema de recogida neumática en esta zona presenta además distintos inconvenientes, como los ruidos del sistema de recogida a través del punto de succión, la limitación del tamaño de las bolsas que se pueden depositar, la baja flexibilidad para etapas con más producción de residuos, la consolidación de una barrera estética permanente especialmente llamativa en zonas como la escultura de Cervantes, el habitual abandono de residuos en el exterior, los atascos habituales del sistema, las quejas y peticiones de cambios de ubicación que no pueden ser atendidas y el coste de mantenimiento cada vez más elevado conforme el modelo envejece.

En esta zona, y una vez que concluya el estado de alarma, se mantendrá el mismo sistema que hasta ahora en establecimientos comerciales y de hostelería, y se ofrecerá a todos los vecinos la posibilidad de contar con cubos individuales en los edificios de viviendas o desplazarse a los contenedores más cercanos a sus domicilios.

En cualquier caso, todos los residentes, comercios y establecimientos de hostelería pueden solicitar, a través del 010, su distrito o correo electrónico un cubo de uso individual para la recogida de los residuos en su puerta.