El parque de olas artificiales Aläia Bay en Suiza ha instalado un sistema de iluminación que garantiza una perfecta visibilidad y seguridad
Esquiar y hacer surf en un mismo día se ha convertido en una realidad en Alaïa Bay, un parque de olas artificiales situado en una ladera de los Alpes (Suiza), gracias a la ingeniería y arquitectura de Wavegarden, a la prescripción y dirección de obra de Elektra y a la innovadora tecnología de iluminación de Signify (Euronext: LIGHT), líder mundial en iluminación.
Una instalación deportiva de estas características requería de una iluminación que garantizara la perfecta visibilidad y seguridad de los usuarios, minimizando el riesgo de accidentes. Para la iluminación de la laguna de surf se han utilizado proyectores Optivision LED gen3 y Clearflood sobre columnas de 24 metros de altura, que han permitido ampliar el horario de uso del parque de olas incluso durante la noche, proporcionando a los usuarios una experiencia de surf única y, al mismo tiempo, seguridad al equipo de socorrismo y mantenimiento.
La tecnología LED de Signify y el software de gestión Interact han sido claves para la realización de este inusual y ambicioso proyecto y además suponen una solución de iluminación de larga vida útil, lo que ayuda a minimizar las tareas de mantenimiento y a maximizar la rentabilidad de la inversión realizada.
La gestión del sistema de iluminación se realiza mediante Interact, la plataforma de control remoto online de Signify, que se ha integrado a la perfección con el sistema de Wavegarden, permitiendo a los operadores de Alaïa Bay gestionar la generación de olas y crear escenas de luz personalizadas desde un único panel de control. Los operadores podrán incluso sincronizar la iluminación con la música o con el ritmo de las olas.
Interact es un sistema abierto, preparado para futuras ampliaciones y actualizaciones, pudiendo crecer con las necesidades del cliente. Además, es un sistema extremadamente eficiente que proporciona a Alaïa Bay un ahorro de energía y emisiones de CO2 del 35% en comparación con un sistema de iluminación LED convencional, evitando contaminar lumínicamente el cielo nocturno. A todas estas ventajas se añade una larga vida útil tanto de los productos de iluminación como del sistema de control, lo que minimiza las labores de mantenimiento y la inversión.
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