Medio Ambiente

València se destaca por gestionar eficientemente 24.000 toneladas anuales de residuos de papel y cartón, transformando lo que muchos consideran desechos en una fuente de ingresos para las arcas municipales. La ciudadanía colabora reutilizando cajas de cartón para manualidades, la creación de fallas escolares o el almacenamiento de ropa fuera de temporada, ejemplificando la economía circular que promueven las instituciones europeas.

El Ayuntamiento de València, a través de sus contratas municipales de limpieza, recoge los residuos de los contenedores azules y los embalajes comerciales puerta a puerta. Posteriormente, licita públicamente la "enajenación de los residuos de papel y cartón", permitiendo que empresas especializadas gestionen el material durante dos años, prorrogables por otros dos.

El papel, al ser completamente reciclable, pasa por un proceso meticuloso. La empresa adjudicataria clasifica, acondiciona y enfarda los residuos, que son enviados a fábricas papeleras

Actualmente, Acteco, desde su planta en Náquera, gestiona este proceso para la ciudad. En la etapa final, el material se mezcla con agua para separar fibras de papel de grapas y plásticos, eliminando la tinta con tensioactivos. Finalmente, las fibras secas se compactan en láminas de papel reciclado.

Beneficios económicos y variables del mercado

Según los pliegos técnicos del contrato, el Ayuntamiento prevé ingresar 1,7 millones de euros anuales, sin contar el IVA. El precio final depende de la cotización mensual del papel de calidad 1.04, publicada por la Asociación Española del Sector del Papel y Cartón (ASPAPEL). Por ejemplo, en septiembre de 2024, el precio por tonelada era de 73 euros.

La generación de residuos está estrechamente vinculada a la situación económica y a las temporadas festivas. Durante la Navidad, por ejemplo, los embalajes de juguetes y envoltorios de regalo inundan los contenedores azules.

Supervisión y control de calidad

La empresa adjudicataria debe pesar cada carga de papel y cartón y enviar certificados de calibración de básculas al Ayuntamiento. Además, el consistorio se reserva el derecho de realizar pesajes aleatorios para verificar la exactitud del proceso.

El objetivo final de esta iniciativa es reducir la generación de residuos, minimizar el impacto ambiental y mejorar la eficiencia en el uso de recursos naturales. Este enfoque busca proteger el medio ambiente y la salud humana, al tiempo que impulsa un modelo económico circular y sostenible, facilitando una transición ecológica justa en la Comunitat Valenciana.