28/05/2019
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Valladolid ha aprobado la contratación de las obras para la renaturalización y mejora de la marquesina de la plaza España y la construcción e instalación de varios jardines verticales móviles en la ciudad. La licitación se llevará a cabo a través de procedimiento abierto, y en los próximos días se publicará el anuncio en el perfil del contratante del Ayuntamiento de Valladolid.
El contrato de obras responde a la necesidad de cumplir los compromisos establecidos en el marco del proyecto europeo URBAN GreenUP financiado por el programa Horizonte 2020 y del que el Ayuntamiento de Valladolid es socio beneficiario y coordinador del alrededor de 40 actuaciones que se llevarán a cabo en la ciudad en el marco de este proyecto. La Concejalía de Hacienda, y Promoción Económica del Ayuntamiento, a través de su Agencia de Innovación y Desarrollo Económico, es la encargada de llevar a cabo las actuaciones del proyecto previstas en Valladolid, que ha contado con la colaboración de las de Urbanismo y Medio Ambiente.
URBAN GreenUP, un proyecto de 25 socios de nueve países, tiene por objeto el desarrollo, aplicación y reproducción de planes de renaturalización urbana en varias ciudades europeas y no europeas, con el objetivo de mitigar los efectos del cambio climático, mejorar la calidad del aire y la gestión del agua, así como aumentar la sostenibilidad de las ciudades a través de soluciones innovadoras basadas en la naturaleza. Con una duración de cinco años (de 2017 a 2022), las tres ciudades demostradoras, Valladolid, Liverpool (Reino Unido) e Esmirna (Turquía), validarán y demostrarán la eficacia de la metodología de renaturalización urbana contemplada en URBAN GreenUP, implementando en las ciudades diferentes soluciones.
Entre estas actuaciones se encuentran las que son objeto de este contrato, que se ha dividido en dos lotes. El primero, referido a la marquesina de la plaza España, comprende la rehabilitación de la misma mediante la impermeabilización de toda la cubierta para reparar las goteras existentes y la instalación de una cobertura vegetal con sistema de riego incorporado en los laterales de la misma, pues debido a limitaciones estructurales, no es posible cubrir todo el vano. La cubierta vegetal aumentará el aislamiento térmico de la misma y, además, se resolverá el problema actual de recogida de aguas de lluvia de la cubierta a través de un sistema de canalones y bajantes, por lo que ya no caerá libremente por los laterales. La marquesina se convertirá en un referente de integración de arquitectura y naturaleza, y dotará a la zona de un nuevo aspecto más fresco y saludable. Esta actuación supone recuperar en parte la plaza de España como espacio ajardinado, si bien ahora este mismo espacio contará con ese componente verde, pero de forma compatible, al superponerse con los usos de mercado y de aparcamiento subterráneo actuales y que no existían cuando la plaza era un pequeño jardín con coches aparcados alrededor, tal y como se puede ver en postales de los años 60 y 70 del pasado siglo. Las obras se planificarán de tal forma que el impacto en la actividad del mercado sea el menor posible y está previsto que pueda adjudicarse el contrato este mismo verano.
El segundo lote comprende la construcción de tres diferentes tipos de jardines verticales, así como su instalación. El que tendrá mayor impacto será el que se instalará en la plaza de Portugalete, y estará formado por todas las letras de la palabra Valladolid sobre un banco alcanzando un tamaño de doce metros de largo y casi dos de alto. Como la ciudad de Vitoria, Valladolid contará con este reclamo turístico verde y sostenible. También se instalarán dos jardines verticales que integrarán un sistema innovador de ventiladores solares en la Plaza de Zorrilla y la Plaza Rinconada.
Por último, doce cuadros vegetales modulares de menor tamaño se instalarán en diferentes zonas del centro, y formarán parte de la red de jardineras y árboles con que el Ayuntamiento dota a la ciudad con el fin de reverdecerla y hacerla más agradable y saludable para la ciudadanía. Aunque en principio los jardines estarán instalados de forma fija en estas ubicaciones, su sistema permite que puedan desplazarse a otros lugares, retirándolos si es preciso para facilitar eventos o incluso trasladándolos precisamente para apoyar su celebración y dar más visibilidad a la apuesta verde de la ciudad.
Las especificaciones técnicas de los proyectos han sido desarrolladas por SingularGreen S.L., una compañía especializada en arquitectura de paisaje que trabaja en la integración de elementos naturales en la arquitectura urbana a través de jardines verticales, tejados verdes y otras infraestructuras verdes, socia también del proyecto URBAN GreenUP.
El valor estimado del contrato es de 220.630 euros, cantidad a la que habría que sumar el correspondiente IVA, siendo 87.501 euros la parte destinada para al primer lote y 133.129 euros al segundo. La Unión Europea, a través del proyecto URBAN GreenUP financiará 176.600 euros del total.
Con ello se abre una oportunidad para las empresas de construcción y jardinería de poder ejecutar estas obras emblemáticas y de carácter innovador para la ciudad de Valladolid y que aportarán beneficios a los ciudadanos de la ciudad, entre los que se encuentra la reducción del efecto de isla de calor, la mejora de la calidad del aire, y la generación de diferentes focos de atracción turística que repercutirán en la economía local.
Entre otras actuaciones vinculadas al proyecto Urban GreenUp se encuentra la instalación de la fachada vegetal en el edificio de El Corte Inglés de la calle Constitución, a través de un convenio entre las dos partes para colaborar técnica y financiera en la ejecución de las obras y que próximamente también saldrá a licitación pública. También se incluyen los toldos vegetados que se instalarán en la calle Santa María, una solución muy innovadora que supondrá una nueva imagen para la calle y que beneficiará a los comerciantes de la zona y los peatones y que se licitará también este año.
Otras intervenciones abarcan la instalación de una cubierta verde en la azotea del Mercado del Campillo; barreras verdes contra el ruido en puntos de alta densidad del mismo; incremento de la diversidad arbórea; mejora de la movilidad a través de la creación de un corredor verde que cruzará la ciudad de este a oeste y que integrará un carril bici; sistemas urbanos de drenaje sostenible en diferentes puntos de la ciudad para reducir los problemas de escorrentía en periodos de fuertes lluvias o una planta natural de tratamiento de aguas, que a través de unos sistemas naturales es capaz de que el agua sucia pueda ser reutilizada para riego.
El proyecto URBAN GreenUP tiene un enfoque integrado para la implementación de estas intervenciones técnicas en la ciudad, pero complementadas con numerosas acciones de tipo social de carácter no técnico, en las que se busca facilitar la participación ciudadana, incrementar la sensibilización frente al cambio climático, así como promover la comunicación y difusión del proyecto entre los ciudadanos.
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