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La Diputación Foral de Bizkaia ha iniciado la sustitución de los contenedores amarillos por un modelo 100% reciclable y la renovación de la flota de camiones de envases ligeros, adquiriendo vehículos con combustible GNC (gas natural comprimido) y adaptando parte de la flota existente a un sistema dual gasóleo-GNC. Estos cambios, en los que la Institución foral ha invertido 7,8 millones de euros a través de su sociedad pública Garbiker, permiten que el servicio gane en eficiencia y sostenibilidad por las propias características de los contenedores y de los vehículos.
“Esta renovación del servicio de recogida de envases ligeros tiene un doble objetivo: el de hacer que sea cada vez más sostenible y el de implementar también los principios de la economía circular en la gestión del día a día de la Diputación Foral de Bizkaia. En ese sentido, estamos avanzando, contribuyendo a emitir menos gases nocivos a la atmósfera con la nueva flota de camiones y, también, por las características de los contenedores, a esa aplicación de la economía circular. Éste es un ejemplo más de nuestro compromiso con la lucha contra el cambio climático y también con la mejora continua y la búsqueda de la excelencia en los servicios que prestamos”, señaló la diputada foral de Sostenibilidad y Medio Natural, Elena Unzueta, durante la presentación de la renovación del sistema de recogida de envases ligeros en Bizkaia.
Una presentación en la que estuvo acompañada por la directora general de Medio Ambiente de la Institución Foral, María Presa, y el director gerente de Garbiker, Jon Sáenz de Viguera, y que se desarrolló frente al Palacio Foral, en plena Gran Vía de Bilbao.
Garbiker ha iniciado ya la colocación progresiva en las rutas de recogida de los 4.290 nuevos contenedores, que tienen formas redondeadas y un tronco piramidal que facilita la recogida y la hace más eficiente. Además de ser totalmente reciclables, están fabricados en acero al carbono, con un porcentaje que va del 20% al 40% de acero reciclado por lo que en ellos se aplican los principios de sostenibilidad y economía circular. El hecho de que sean contenedores metálicos les aporta otras ventajas añadidas, como tener una vida útil más larga que los elaborados con materiales plásticos.
Además, estos depósitos resuelven dos problemas a los que se enfrentan habitualmente otro tipo de contenedores: el fuego y los vuelcos a causa del viento. El nuevo modelo que se está instalando en Bizkaia está construido con materiales ignífugos y su peso y sus formas ergonómicas, que permiten la circulación del viento de manera fluida, le confieren una mayor estabilidad y, por tanto, menores posibilidades de vuelco.
La distribución por el territorio vizcaíno de los nuevos contenedores, que concluirá a lo largo de este año, comenzó en las rutas de Enkarterri y Txorierri, que, por sus características (orografía, dispersión de contenedores, ubicación de los mismos…) aportaron a Garbiker datos para realizar el resto del proceso de sustitución de forma más eficiente. En concreto, se eligieron estas comarcas porque se trata de dos zonas de tipología antagónica, lo que ha permitido a los técnicos de esta sociedad pública foral contrastar el despliegue en situaciones muy diferentes en cuanto a tiempo de ruta, los accesos, o la dispersión de los núcleos urbanos y de los puntos de colocación de los contenedores, entre otras cuestiones.
En cuanto a los camiones, su renovación se ha visto condicionada e gran medida por la voluntad de los responsables del Departamento de Sostenibilidad y Medio Natural de la Diputación Foral de Bizkaia y de la propia Garbiker de que tuvieran un comportamiento más respetuoso medioambientalmente y, al mismo tiempo, por la aplicación de mejoras en el propio servicio. En ese sentido, y con el objetivo de reducir el uso de combustibles sólidos y las emisiones de gases nocivos para el medio ambiente, se optó por la adquisición de 7 vehículos con combustible GNC y 6 dualizados (gasóleo y GNC) y por la adaptación de otros 3 camiones de los que ya prestaban servicio para que funcionen de forma dual.
Los beneficios medioambientales de esta sustitución, en la que la Diputación Foral de Bizkaia ha invertido 3,5 millones de euros a través de Garbiker, son evidentes. Los camiones con GNC suponen una reducción del 77% de óxidos de nitrógeno (NOx), un 70% menos de partículas metálicas y un 10% menos de emisiones de CO2, y los vehículos dualizados emiten un 26% menos de NOx, un 24% menos de partículas metálicas y un 5% de CO2.
La nueva flota de camiones tiene también ventajas operativas. Son principalmente dos. La primera, que está dotada de un sistema mono-operador de recogida automatizado que reduce los tiempos de carga y descarga y mejora las condiciones de trabajo de las personas que lo manejan, ya que evita en gran medida que tengan que subir y bajar del vehículo. La segunda es que los camiones disponen de un sistema de recogida de datos y pesaje automático que hace posible disponer de mayor cantidad y calidad de datos lo que, a su vez, permite realizar un análisis más exhaustivo del servicio del que pueden surgir nuevas acciones a incluir en los procesos de mejora continua que aplica Garbiker en todas las facetas de la gestión de los residuos sólidos urbanos del territorio de Bizkaia.
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